Se terminaron los capítulos de la primera temporada, pero hay algo más. The Signal es el primero de los dos episodios extra preparados para Alan Wake, y aunque la señal es de corto alcance y se mueve en una frecuencia conocida, tiene unas formas bien interesantes que es necesario puntualizar.
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The Signal empieza justo donde quedó Alan Wake en su último episodio. No es la idea caer en spoilers, y solo basta recordar que el final del juego o es muy abierto o las posibles interpretaciones de los hechos se cuentan por más de dos. La gran diferencia, es que mientras los eventos de la historia principal suceden en locaciones tangibles, aquí pasa todo lo contrario.
Si el subconsciente de Wake ya le jugó malas pasadas antes, ahora definitivamente lo maltrata sin asco. Bright Falls ya no es lo que era; sigue siendo territorio conocido, pero su distribución física es radicalmente distinta, y eso da pie a situaciones más complejas en cuanto a como ocurre la acción. Los enemigos se abarrotan en mayores cantidades, en espacios más pequeños y son más agresivos, sin contar que la cantidad de objetos poseídos es mayor. Hay un par de ocasiones en que incluso lo mejor es evitar el combate y correr hacia la luz, y que eso ocurra en el lapso de un solo capítulo ya es bastante decidor.
También se saca provecho a una mecánica que se ocupó apenas una o dos veces en la historia principal: las palabras que al iluminarlas se convierten en objetos. «Herramientas» nos suelta provisiones, «Fogonazo» una explosión de luz bastante útil, «Amigo» genera la imagen de Barry, etcétera. ¿Y como pasar una sección donde todas las palabras son «Enemigo» y «Cuervos»? Ni tan difícil ni tan fácil, pero si es cierto que su inclusión le agrega algo de sustancia a la jugabilidad a lo largo del capítulo.
Y ya sea por tratarse del subconsciente de Wake, narrativamente el capítulo entero es bastante denso. No hay un hilo conductor más complejo que seguir la señal, pero las instrucciones de la luz, o quien sea que dirige a Alan, por momentos escapan a cualquier lógica. La compañía de Barry en gran parte de lo que dura el episodio no sirve más que para acentuar la sensación de estar en una pesadilla de Wake, y ese agobio se traspasa muy bien al que juega.
The Signal no es una conclusión de la historia ni mucho menos, y de seguro que los cabos sueltos se van a cerrar en el próximo episodio. Pero al poner en la balanza sus elementos narrativos y jugables, da como resultado un capítulo con harta consistencia: hay una buena dosis acción, requiere mayor atención a los enemigos, y el desarrollo de la mini historia está más retorcido. No dura más de 2 horas, aunque tampoco se podría esperar mucho más al tratarse de un capítulo como los que componen la historia principal, y los elementos coleccionables están solo para el respectivo logro. Fuera de eso, The Signal es un agregado muy recomendable de Alan Wake, ya sea gratis o por los 560 puntos que cuesta.
Lo imperdible:
- La mecánica de las palabras-objetos.
- Hay más acción.
- El subconsciente de Alan Wake da lugar a una narración muy densa y a un Bright Falls diferente a lo conocido.
Lo impresentable:
- Era esperable: 2 horas como mucho.
Notable …al poner en la balanza sus elementos narrativos y jugables, da como resultado un capítulo con harta consistencia.»
Link: NB Labs de Alan Wake