Especiales

NB Labs: The Cave

Puzzles, plataformas, humor y estilo… cortesía del creador de Monkey Island.

Plataformas: Xbox (analizada), PlayStation 3, Wii U, PC, MacDesarrollador: Double FineDistribuidor: Sega

The Cave es la reciente propuesta de Ron Gilbert, mente maestra tras clásicos como Monkey Island y Maniac Mansion. Este juego descargable es distinto, lleno personalidad y propuesta, pensado para un público puntual y si bien tiene ripios, resulta muy interesante.

La identidad de The Cave queda clara desde un comienzo; un narrador de voz ‘misteriosa y sensual’ (como él mismo define) se presenta apenas iniciada la aventura. Esta voz es ni más ni menos que La Cueva, una entidad que durante cientos de miles de años ha recibido la visita de personas que buscan aquello que más desean. En esta ocasión conoceremos al caballero, el campesino (paleto, según la traducción), la viajera del futuro, la científica, la aventurera, los gemelos y el monje, todos ellos buscando una oportunidad de alcanzar su objetivo en La Cueva.

Cada uno de ellos cuenta con una habilidad especial y el jugador tendrá que escoger a 3 de estos personajes y comenzar la aventura. Al adentrarnos cada vez más en La Cueva comenzamos a conocer su personalidad mientras todo se hace cada vez más oscuro y lúgubre, encontrando interesantes e ingeniosos puzzles cuya resolución depende completamente del uso independiente de los personaje como también de nuestra inteligencia, imaginación y conocimiento del contexto.

Decir que The Cave es un juego de plataformas y puzzles es extraordinariamente acertado. Este no es un juego para quienes se rinden a la primera, no quieren entregar de su parte o apenas se aburren corren a YouTube a buscar una solución. El alma y carisma de The Cave yace en un trabajado, brillante y equilibrado sistema de puzzles donde todos presentan un buen pero extraordinariamente justo desafío; no son fáciles como para insultar la inteligencia del jugador ni mega difíciles como para decir ‘no hubiese pensado en eso nunca’. Este fino balance permite que el juego no genere anticuerpos en los usuarios y genere una cuota de intriga (e incluso un poco de morbo) en saber cómo se soluciona “x” desafío.

Cada personaje cuenta con historia y puzzles exclusivos. Para conocer todo lo que The Cave tiene para ofrecer (incluyendo los infaltables coleccionables) es necesario completar 3 veces el juego, aspecto que incentiva la repetitividad y vida útil de este título. Los escenarios son variados, oscuros, en clara sintonía con la personalidad del juego y resultan un agradable ejercicio imaginativo. Esto se conjuga gratamente con un estilo visual que puede parecer sencillo pero cuenta con interesantes (y no muy notorios a primera vista) efectos de brillo, sombra e iluminación y una identidad gráfica que conserva mucho de lo establecido por Gilbert y compañía hace ya un par de décadas.

El concepto plataforma/puzzle puede asustar a algunos… pero su implementación resulta casi ideal. Este título, que se puede disfrutar de hasta 3,  es sencillo en su esencia pero desafiante en sus puzzles. Hay pocos botones en el control, ya que la dificultad se sitúa en la visión del jugador y no en su habilidad manual.

The Cave comete un par de pecados técnicos y otros que, honestamente, dependen del jugador. Los más notorio es su inestable tasa de cuadros por segundo; el juego luce bien, fluye de manera suave y cumplidora, pero cuando la cámara se mueve un poco más rápido o brusco de lo normal presenta tirones y una marcada baja en esa fluidez.

Los controles no son malos pero algo en ellos me impide tildarlos de precisos, especialmente en las orillas de las plataformas y al momento de saltar. Por otro lado y en un campo mucho más subjetivo, The Cave es un juego para un tipo de público en particular, uno que no espera más que interesantes desafíos, detalle por el cual su ritmo de juego es más bien lento.

Ron Gilbert y Double Fine hicieron un buen trabajo. The Cave es un juego especial y distinto, un título que sabe lo que desea ser y ofrecer, que vive su potencial y explota su premisa sin miedo a apuntar a un público específico. Bebe de la identidad y línea creativa de Monkey Island y Maniac Mansion (y al jugarlo se nota), se desmarca y a pesar de sus problemas destaca como un título distinto y diferente que ofrece un interesante y original desafío. Hoy pocos juegos pueden decir eso.

Lo imperdible:

– Excelente diseño de puzzles y niveles
– Gran trabajo de arte y notable sentido del humor
– El narrador es La Cueva… y se roba la película

Lo mejorable:

– Inestable tasa de cuadros por segundo
– Pequeños pero presentes problemas de control, especialmente al saltar

 

¿Qué significa ésto?

Tags

Lo Último


Te recomendamos