Sabemos muy bien que la política en Chile es algo “mañosa” en el sentido de saber cómo se aprueba las leyes que se fabrican. A razón de eso, decidí darle una vuelta personal sobre en qué va la ley. Tómenlo como un artículo de utilidad pública.
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En concreto, el infame proyecto de ley sigue siendo tal hasta este momento. Puesto de otra manera, todavía no hay nada aprobado ni promulgado, como si estuviese listo para que se haga su cumplimiento. La “Ley de Videojuegos Violentos” (Boletín N° 5.579-03) todavía le falta un último papeleo definitivo, llamado Tercer Trámite Constitucional.
El Tercer Trámite Constitucional es básicamente la discusión sobre el proyecto de ley después que ha sido revisado por la otra cámara. En este caso, la ley se originó desde la Cámara de Diputados. Después de ser maquillada y alterada por la Cámara de Senadores, vuelve a la anterior para que discutan los últimos arreglos, y vean si les gustan o no.
Con el Proyecto de Ley en la Cámara de Diputados pueden pasar dos cosas. Si lo aprueban pasa a las manos del Presidente de la República, que lo firma y termina como Ley. Caso contrario, si no les gusta parte o todo, hay comisión mixta (con ambas Cámaras), donde nuevamente se discute y arregla. Después que aprueben los arreglos, pasa a manos del máximo para que firme.
Ni idea cuándo la discutirán, según me comentaron tenían hasta fin de mes pero no soy experto en leyes – ojalá me hubiesen enseñado eso en la escuela. A estas alturas parece más un tema de cuándo será aprobada y promulgada que de si pasará por algún filtro o milagro para que la detenga. Ya quedó en evidencia múltiples veces el total desconocimiento sobre este tipo de contenido por parte de los involucrados, así que como va pinta el asunto lo más probable es que quede la embarrada y después todos se estén preguntando cómo logró pasar con los pulgares arriba.
Sin ánimos de dejarles una depresión gamer, les dejo un interesante tira por sephko (via El Definido).