Niubie Labs

Puppeteer [NB Labs]

Una breve reflexión sobre lo que ofrece este singular juego sobre una marioneta descabezada.

Plataformas: PlayStation 3Desarrollador: SCE Japan StudioDistribuidor: SCE

Durante los últimos años, las narrativas en los videojuegos han sido comparadas ampliamente con las estructuras observadas en el cine o la televisión, pues no es secreto que los modelos argumentales en el mundo del entretenimiento virtual tomen algunos elementos de estos medios para construir sus relatos. Es por ello que el juego Puppeteer es tan singular, ya que rompe esquemas, se aleja de lo convencional y presenta un mundo irreverente basado en el arte del teatro de marionetas.

Se trata de una puesta en escena en la que el jugador toma el papel de espectador y titiritero al mismo tiempo, pues además de controlar a Kutaro, el protagonista de la historia, también observa lo que acontece dentro del relato a través de una pantalla integrada por el telón y la tramoya (máquinas e instrumentos con los que se efectúan los cambios de decorado y los efectos especiales en las representaciones teatrales).

Pero el teatro de títeres no se detiene sólo en su composición estética. La construcción del guión, la música y el abanico de sonidos juegan un papel igual de importante que aquello que entra por los ojos. En Puppeteer, el grupo de desarrolladores de Japan Studio ha puesto especial cuidado en todos estos componentes para rendirle tributo a este arte milenario, así que el nivel de detalle es excelso.

Ante la ausencia de expresiones faciales, los gestos y la entonación de voz constituyen la personalidad de las marionetas, y eso es algo que los desarrolladores sabían muy bien. Por fortuna, para nuestra región tenemos un doblaje de primera (quizá uno de los mejores que se ha hecho en un videojuego) con la participación de actores de renombre como Carlos Segundo (Piccoro en Dragon Ball), Magda Giner (Lois en Malcolm in The Middle), Leyla Rangel (Rory en Gilmore Girls), entre muchos otros que verdaderamente se convierten en piezas fundamentales del juego.

Incluso, me atrevería a decir que sin este excelente trabajo de doblaje, Puppeteer no hubiera sido lo mismo y la sensación que transmite se hubiera visto en exceso reducida.

De igual forma, el apartado sonoro cumple con un rol determinante a la hora de transportar al jugador a una butaca enfrente del escenario, y es que además de tener sonidos para las acciones de los actores en pantalla, también podemos escuchar las reacciones del público que ríe, aplaude o exclama de asombro de acuerdo a la actuación del jugador.

Otro de los principales diferenciadores de este juego es el constante cambio en la escenografía, que produce la ilusión del cambio de espacio físico aunque todo acontezca exactamente en el mismo lugar, bajo el mismo telón. Para darle más fuerza a este concepto, interviene también un importante abanico de sonidos como el chirrido de la madera o el golpeteo cuando una nueva “maqueta” es colocada sobre la tarima principal. Si alguna vez han asistido a una obra de teatro de títeres, entonces sabrán de lo que hablo.

Puppeteer es un título que brilla no por su jugabilidad, que a fin de cuentas no presenta algo substancialmente nuevo comparado al gran catálogo de juegos side-scrolling que hay en el mercado, sino por el gran trabajo de los desarrolladores de plasmar un arte que muchas veces parece perdido: el del teatro de títeres.

Vale también la pena resaltar el experimento que se trató de implementar en Puppeteer, uno que pone al jugador en el papel de titiritero y espectador al mismo tiempo para crear dos niveles de inmersión diferentes. El resultado es por demás interesante y bajo las condiciones apropiadas (jugando a oscuras con un buen sistema de teatro en casa) se transforma en una experiencia que no pueden dejar pasar.

Personalmente, creo que el punto débil del juego lo encontramos en la monotonía de su jugabilidad y el poco riesgo que tomaron los desarrolladores en algunas mecánicas que bien pudieron haber agregado variedad a la fórmula (como el constante cambio de cabezas que realmente tiene poca injerencia en el juego). Aún así, Puppeteer se trata de algo realmente diferente que echa buenas raíces y que podría incentivar a que otros desarrolladores intenten salirse de los márgenes para entregar cosas nunca antes vistas.

¿Qué significa esto?

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