Cualquiera se sorprendería con la cantidad de personas que sueñan con viajar al espacio algún día, pero se dedican a actividades que no tienen nada que ver con la astronomía. Pero también es cierto que ir hacia la órbita de la Tierra requiere de preparación en muchos ámbitos, entonces, a quien menos lo espera podría llegarle esta oportunidad.
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De quien vamos a hablar en esta reseña no goza de la posibilidad de viajar al espacio todavía, pero está más cerca que muchos otros soñadores. Se trata de Guillermo Rojo un atleta y guía paralímpico que ahora se dedica a entrenar astronautas. Tanto, que hasta su mismo Instagram ahora lleva el user de @SpaceTrainer.
Su especialidad es el atletismo tanto como corredor profesional como guía paralímpico. El sitio Runners World publica una nota en la que informa que Guillermo Rojo es campeón paralímpico. Además, uno de los atletas a los que asiste, llamado Gerard Descarrega, ganó la medalla de plata en los 400 metros Clase T11 de ciegos totales, en el Mundial Paralímpico de París, realizado en julio de este año.
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Un mes después de su travesía como guía Paralímpico se aventuró bajo el rol de comandante, en la Misión UCAM Nike II, de la NASA, la Agencia Espacial Europea (ESA) y el centro de investigación lunar, que se desarrolló en Polonia.
¿De qué se trata esta misión? El portal citado informa que fue un experimento psicológico y sociológico en el que varias personas, incluyendo Guillermo, se enfrentaron a condiciones de aislamiento y limitación de recursos en entornos que simulan la Luna.
Rojo tuvo como objetivo fue velar que cada una de las empresas y agencias colaboradoras con la misión realicen el envío de datos a tiempo, para probar la tecnología de transmisión de información de las agencias espaciales, que se ejecutarán en futuras misiones hacia el satélite natural.
“Recién llegado de la misión UCAM Nike II, en Polonia. La misma, consistía en un periodo de 15 días de aislamiento completo (a nivel físico e interacciones sociales) dentro de un hangar militar, donde realizamos experimentos en campos como la psicología, biología, tecnología, y entrenamiento, entre otros”, escribió Guillermo en su cuenta de Instagram, tras completar el proyecto.
“Es curioso cómo se adapta el cuerpo a entornos extremos. En lo profesional, un absoluto placer trabajar por el progreso la ciencia espacial que nos lleve a otros cuerpos planetarios. Hemos podido recoger datos de gran importancia y mejorar procedimientos para próximas misiones. En lo personal, todo un reto. Los que me conocéis bien, sabéis la importancia para mí del contacto con la naturaleza y el entrenamiento de forma diaria”, relató rojo.
Finaliza hablando de su sueño: viajar verdaderamente al espacio algún día. “Afortunadamente, hemos tenido un gran volumen de trabajo, que mantenía la mente ocupada. Un paso más cerca”, destacó.