Parece que Google ha decidido implementar una de sus jugadas más distintivas y habría decidido desconectar el cable para matar de forma definitiva su línea de portátiles Pixelbook. Y este reporte nos ha puesto un poco nostálgicos sobre lo lo que vivimos hace tiempo con esta laptop.
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Corría la segunda mitad de 2017 cuando el equipo editorial de FayerWayer tuvo oportunidad de jugar un rato con la recién anunciada (en aquel entonces) Google Pixelbook.
Se trataba de una portátil llamada a revolucionar este competido mercado, donde el hardware parecía que había llegado a un relativo callejón sin salida y en donde una propuesta de equilibrio único entre componentes y software parecían la evolución más prometedora.
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Estábamos a años de que Apple lanzara su procesador M1 y alterara la dinámica del mercado junto con las reglas del juego. Pero en aquel momento la laptop de Google era una absoluta incógnita para todos.
En ese momento las primeras impresiones sobre la Pixelbook es que en términos de hardware y diseño, la Pixelbook se sentía como una portátil sólida que tendría todos los elementos para competir contra una ultrabook.
El detalle de integrar un stylus, el Pixelbook Pen, prometía convertir a la laptop en uno de los productos más llamativos del sector por su funcionamiento y desempeño.
Pero al final la computadora tenía un pequeño gran problema que con el paso de los años se terminó arraigando como su principal limitante: Chrome OS.
Google habría cancelado la producción de la Pixelbook
En el más reciente de los giros en torno a este drama los colegas de The Verge han publicado un inquietante reporte, en donde afirman que una fuente allegada con conocimiento sobre el tema les habría notificado sobre la decisión ejecutiva al interior de compañía de cancelar el desarrollo y producción de la Pixelbook.
En teoría la empresa habría abandonado por completo el proyecto de lanzar una nueva generación de portátiles como parte de un complejo y sacrificado plan enfocado a recortar gastos operativos.
El sitio tuvo oportunidad de obtener una declaración oficial de Laura Breen, portavoz de la empresa tecnológica, aunque lo dicho no es nada contundente:
“Google no comparte planes de productos futuros ni información sobre el personal; sin embargo, estamos comprometidos con la creación y el apoyo de una cartera de productos que sean innovadores y útiles para nuestros usuarios.
En lo que respecta a nuestro personal, en los momentos en los que cambiamos las prioridades, trabajamos para la transición de los miembros del equipo entre los dispositivos y los servicios.”
El reporte original afirma que el plan original habría sido lanzar una nueva Pixelbook en el año 2023, pero al final habría cancelado el proyecto para reducir sus costes internos y hasta habrían llegado al extremo de disolver al equipo de trabajo detrás de la portátil.
En otras palabras, con esta jugada, se habría matado por completo a la laptop y no parece haber una fecha tentativa para su regreso.